Le Kañí es un restaurante japonés fusión para el que dividimos el proyecto en tres áreas:
La primera que observarán los clientes al adentrarse en el local tiene una barra japonesa, donde degustar sus platos observando como termina de prepararlos el chef.
Continúa con la parte de restaurante, con una bancada serpiente rojo rubí, mesas curvas y sillones con estampado floreado que le aportan frescura al interiorismo.
Finalizamos con una zona privada para eventos, con una gran puerta panel para poder subdividirlo en dos estancias.
Cada espacio tiene su propia identidad, pero todos mantienen una iluminación tenue y estilo coherente entre ellas, creando una buena armonía al desenvolverse por todo el local.
Con la selección de materiales naturales como el latón, la madera de roble, la piedra natural blanco porcelana y verde carruaje, sumadas al buen trabajo realizado sobre ellos, se quiso aportar la elegancia e imagen cuidada del restaurante.
Las telas de los tapizados, combinando terciopelos y estampados, encajan a la perfección creando una atmósfera agradable para los comensales.